martes, 15 de septiembre de 2009

Emociones encontradas ( Sabela)





Ya estoy de vuelta, no se si alegrarme o ponerme a llorar, el viaje ha tenido un efecto renovador en todos los sentidos, pero sobre todo y mas importante dentro de mi.


Ahora desde la retrospectiva de la distancia veo lo mucho que necesitaba ir a Galicia, poner en orden mis pensamientos cansados de un duro verano. Salí de Madrid con la intención de escribir mis sensaciones y describir los lugares, vamos poner en letra en un cuaderno lo que aconteciera durante esos días, y así lo hice. Me levantaba por las mañanas y mientras mis chicos continuaban durmiendo yo escribía y disfrutaba de esos ratos en los que plasmaba en un papel todo lo sucedido el día anterior. Aquí dejare constancia solo de algunos lugares pues escribir de los quince días seria un poco aburrido para los que entráis a visitarme, intentare hacer una síntesis de lo que creo mas relevante.








LUGO





Esta visita a Lugo es especial, en ella he conocido a una persona que se llama Sabela, aún no lo sabia pero va a ser nuestro cicerone y al mismo tiempo el detonante que va a hacer de puente entre los recuerdos de mi pasado, gracias a ella muchos de esos recuerdos van a abrirse paso para revivir de nuevo en mi memoria.


Hemos quedado en la Rua de Ramón Ferreiro, me ha dicho (con esa voz tan dulce y al tiempo alegre): iré con pantalón negro y camisa roja, cuando veas a una gordita vestida así sabrás que soy yo, jajajajaja y si allí esta, no se por que pero algo me dice que es ella.


Pelo corto, morena y ojos del país, ojos claros y risueños, vivos muy vivos, vamos que cuando ves a Sabela antes de que su voz te envuelva ya sabes que es Gallega, lo primero un abrazo, fuerte, intenso, cálido, sincero y rotundo... ay Sabela que abrazo tan espontaneo y verdadero.


Tengo que decir que la vida de Sabela y la mía se cruzaron en un momento de nuestras vidas ya anteriormente, cuando ella era una jovencita y yo una niña, nosotras no nos recordamos, pero ella si recuerda a mi padre y a otros miembros de mi familia. Después de muchos años transcurridos quiso el destino darnos esta oportunidad y gracias al blog de Conchi (Conral) entablamos contacto y hoy por fin nos conocimos.


Mujer alegre que en su mirada tiene una luz especial, sensible y cariñosa, cercana pero sobre todo generosa, digo esto pues nos concedió toda la tarde a mi familia y a mi, sacrificó su tiempo libre para poder estar con nosotros sin saber apenas nada de nuestras vidas, nos regaló su tiempo, algo que tristemente no todo el mundo da así como así. Y a mi personalmente me regaló algo muy importante, el comienzo de una amistad, que mejor regalo hay que alguien que no te conoce te brinde semejante oportunidad.


Esa tarde en Lugo la guardaré no solo en mi memoria, estará muy dentro de mi en un rincón que estaba esperándote para quedarse allí a vivir.


Sabela mil gracias por todo, tu no lo sabes pero estar paseando contigo esa tarde ha sido muy importante para mi, espero y deseo que la próxima visita sea mas larga que esta, como te dije nos volveremos a ver, no se donde ni cuando pero verás como nos encontramos de nuevo.


Conchi gracias a ti también, eres un puente que une y acorta distancias.





Nota: La visita a Lugo no ha terminado, ni el viaje, volveréis a encontraros con Sabela pero esta vez como cicerone en una ciudad que pasa desapercibida para muchas personas, una ciudad tranquila y hermosa de la cual intentare podáis conocer siguiendo los pasos de Sabela.

3 comentarios:

Isabel dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Sabela dijo...

Concha solamente puedo decirte ¡gracias!, ¡moitas grazas!.
Abraos.

Conchi dijo...

Ayyyy, Galle, yo también me he emocionado al leerte y veros a los cuatro juntos en esa hermosa fotografía (la muralla de Lugo, eh?). No sabes cuánto me alegro que ese encuentro fuera posible y que mis dos amigas queridas (Sabela y Concha) se pudieran abrazar. Es increíble el destino, ¿verdad?. Gracias a la idea descabellada y maravillosa de hacer un viaje virtual os conocisteis y resulta que no, que ya os habiais conocido muchos años antes. Yo sólo hice de puente, amigas. Ojalá podamos construir muchos puentes para que haya encuentros como estos.
Os mando un abrazo grandeeee a las dos.

Galle, ese niño está muy guapo y muy grande!!!!
Seguiré la crónica de este viaje encantada. Hace muchos años que fui a Galicia y esos paisajes aún los llevo grabados en mi memoria.
Gracias, amiga.
Conchi